Cristiana Marcos Arias (foto: Verne El País) |
"Me llamo Cristina y soy sorda"
Así comienza Cristina un artículo escrito para Verne El País. Apenas 24 horas después, se hizo viral y se compartió más de 15.000 veces en las redes sociales, aunque la capacidad de Cristina para escribir un artículo que enganchara a miles de personas no es su mayor mérito.Se licenció en Bioquímica en 2005, leyó su tesis doctoral en 2011 con sobresaliente Cum Laude, es autora o coautora de una docena de artículos en prestigiosas revistas científicas y ha presentado medio centenar de comunicaciones en congresos nacionales e internacionales. Su línea de investigación se centra en la Candida, un hongo que produce la infección denominada candidiasis, muy común en la infancia, en las personas mayores y, con especial riesgo y frecuencia, en las personas con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) que origina el sida. Sí, las investigaciones de Cristina están contribuyendo, de alguna manera, a mejorar la salud y la calidad de vida de estos colectivos, pero quizá tampoco sea éste su mayor mérito.
El mayor mérito de Cristina es mantener los pies en la tierra mientras desarrolla una carrera espectacular y demuestra que las personas sordas también tienen mucho que aportar en el ámbito científico. Ella rompe con el mito de que los científicos son personas aburridas: tiene una vena artística que fluye incluso en su trabajo, ya que en 2011 ganó el segundo premio en el III Concurso de Microfotografía en Biomedicina, entre más de 60 candidaturas, con una obra titulada (¿cómo no?) "la huella de Candida".
"La huella de Candida", segundo premio en el III Concurso de Microfotografía en Biomedicina (foto Cristina Marcos / Universidad del País Vasco) |
Su Instagram @bionicaisdeaf está lleno de fotografías, dibujos, pinturas y manualidades. En una de sus últimas imágenes muestra un adorno para su audífono y escribe:
¿Quién dijo que los audífonos pueden ser feos y que deberían ser invisibles? ¿Es fea la sordera?
"¿Pero qué se habían pensado?"
En su artículo en Verne, Cristina cuenta cómo se descubrió su sordera y sus periplos hasta terminar sintiéndose orgullosa de su identidad como persona sorda. Cuenta cómo se encontró con numerosos obstáculos en su vida y cómo sus audífonos, la lectura labial, la emisora de FM y la lengua de signos le ayudaron a superar éstos obstáculos. Pero sobre todo -y seguramente muchas personas sordas se habrán sentido identificadas con ella- Cristina habla de los prejuicios y de la falacia de la superación personal:Lo que no cuentan de la superación es que no es ninguna escalada de éxitos. Se parece a correr una carrera de obstáculos donde tiras las vallas. Fueron mil horas de estudio y clases particulares para demostrar que no era menos que nadie. Pero qué se habían pensado. Copiando buenos apuntes (transcripciones de las clases). Intentando entenderlos por mí misma. Suspendiendo y aprobando. Pensándome como una oyente más, con ciertas dificultades. Y preguntándome muchas veces si merecía la pena.Se puede leer su artículo entero aquí y en el siguiente vídeo se le puede conocer un poco más (subtítulos en castellano). No hay duda, Cristina es una mujer y una científica excepcional.
Fuentes:
- Marcos, C. (2016, junio, 11). "Nadie creía que llegaría a la universidad porque soy sorda: ahora soy científica". En Verne El País. En línea: http://verne.elpais.com/verne/2016/06/07/articulo/1465307573_039543.html?id_externo_rsoc=TW_CM_Verne [último acceso: 26/11/2016]
- Urizar, J. A. (2002). Candidiasis orales. Rev Iberoam Micol, 19, 17-21. En línea: http://www.reviberoammicol.com/2002-19/017021.pdf [último acceso: 26/11/2016]